sábado, 8 de enero de 2011

Crónica de una destitución anunciada

El timing, desde luego, no podía haber sido peor. Ahora que la opción elegida parece ser la más acertada. Un día antes del decisivo enfrentamiento de 3º Ronda de la FA Cup en Old Trafford ante el Manchester United, el Liverpool anunció públicamente esta mañana la marcha de Roy Hodgson. El técnico inglés y el Liverpool ponen fin a su difícil relación “de mutuo consentimiento”, según aparece reflejado en un comunicado difundido por el propio club. La persona designada para suceder a Hodgson en el banquillo será Kenny Dalglish, antiguo jugador y entrenador del Liverpool que actualmente ejercía funciones de embajador para el club. Poco original pero muy descriptiva, esta es la crónica de una destitución anunciada. No hace ni dos días este blog hizo balance de la situación de cuatro técnicos cuestionados (Hodgson, Ancelotti, Grant y Houllier) y el del Liverpool era, sin duda alguna, el que tenía más opciones de salir. No obstante, pocos podían adivinar que la destitución llegaría antes del compromiso copero del fin de semana. La noticia es la que es, pero detrás de ella hay muchas cosas que analizar.

Golpe de Efecto. Adiós Hodgson, hola Dalglish.

No parece, a priori, que el momento elegido para cortar la cabeza al entrenador sea el más idóneo. Gane, pierda o empate la eliminatoria de la FA Cup ante el Manchester United nadie dirá que ha sido gracias al nuevo entrenador. Más que nada porque con menos de 24 horas en el cargo y a penas un entrenamiento con sus nuevos pupilos a Dalglish no le habrá dado tiempo de trabajar un sistema táctico y jugadas de estrategia. Es mi opinión que a Hodgson se le debería haber concedido el honor de jugarse esta eliminatoria contra los rivales del norte. Quizá pocos sepan que el ahora inquilino del banquillo del Liverpool se encontraba hace pocas horas en un crucero por el Índico pasando sus días de vacaciones navideñas. Un día estás disfrutando de tu tiempo de ocio y al día siguiente te juegas la vida con un equipo de fútbol en crisis. No veo yo que Dalglish tenga mucha capacidad para dejar su impronta en la próxima cita del Liverpool.

Hodgson ha demostrado su carácter señorial. Cualquier otro entrenador se habría aferrado al cargo pero el técnico inglés ha sabido echarse a un lado cuando la situación más lo pedía. Entiendo que hay destitución, pero que Hodgson le pondrá fácil las cosas al club, por aquello de que ha sido “de mutuo acuerdo”. Eso sí, el ya ex entrenador del Liverpool ha dejado bien claro que él quería seguir en el cargo y que esperaba levantar el vuelo con apoyo del club y una inversión en fichajes. Estas han sido sus palabras exactas: “Estoy muy triste por no haber podido dejar mi sello en este equipo, por no haber tenido el tiempo de traer nuevos jugadores a este club en el mercado invernal y no haber sido capaz de ser parte de la reconstrucción del Liverpool”. Finalmente, Hodgson reconoció que los 4 meses al frente del club de Anfield han sido “el reto más difícil y desafiante de toda mi carrera”.

Dalglish tomará el mando de la nave ´Red´ hasta el final de temporada. Entonces estará por ver si el Liverpool ha conseguido alguno de sus objetivos y si como Dalglish desearía continúa en su puesto como manager principal con control total. Esta será la segunda etapa de Dalglish como entrenador. Antes se mantuvo durante seis años entre 1985 y 1991 y, como Benítez, consiguió pronto la gloria, ya que ganó el doblete en su primera temporada. La tarea del escocés será dura y ardua pero al menos sabe que contará con la comprensión de la grada y el apoyo de los propietarios.

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