La resurrección del equipo de Flavio Briattore y Bernie Ecclestone

Por David F. Pascual

La Championship inglesa (First Division) se ha encontrado este año con un inesperado animador. No es el histórico Nottingham Forest, ni el poderoso Middlesbrough ni tampoco los recién descendidos Hull y Burnley. La sorpresa de este inicio de curso es el Queens Park Rangers (QPR), equipo de la ciudad de Londres, más conocido por ser el club de la ´casa de los líos´. Tras una temporada para olvidar, con cuatro entrenadores, una galopante crisis institucional, un descenso casi cantado y problemas económicos, el QPR ha vuelto por sus fueros siendo un firme aspirante a volver a la élite del fútbol inglés diecisiete años después.

El Queens Park Rangers es quizás uno de los equipos menos conocidos de Londres. No por ello es un club sin tradición. El QPR, localizado en Shepherd´s Bush (Londres), fue fundado en 1882 tras la fusión del St. Jude's y el Christchurch Rangers. La denominación de Queens Park Rangers se debe a que la mayoría de jugadores procedía de la zona de Queens Park. Entre los éxitos más importantes del club se encuentran la Copa de la Liga conseguida en la 66-67 y los subcampeonatos de Liga (75-76) y FA CUP (81-82). Entre las caras más conocidas del fútbol inglés que han pertenecido al QPR figuran Peter Crouch, David Seaman, Les Ferdinand, Trevor Sinclair o Ray Wilkins, entre otros. La rivalidad más enconada del club se da contra equipos como Chelsea o Fulham, por la proximidad geográfica, aunque para pesar de los incondicionales de los Rangers hace mucho que estos equipos no se enfrentan -salvo si exceptuamos eliminatorias coperas.

Briattore, bien rodeado de féminas, como casi siempre.

Los Rangers han sido últimamente portada más por cuestiones extradeportivas que por sus resultados en la Championship. Mucho ha tenido que ver en esto que Flavio Briattore (ex director deportivo de Renault) y Bernie Ecclestone (máximo mandamás de la Formula Uno) compraran una gran parte del paquete accionarial del QPR en 2007. Lakshmi Mittal, el multimillonario empresario del metal indio, también posee acciones en el equipo de Loftus Road –estadio del QPR-. Inicialmente la entrada de los magnates en el club tuvo una magnífica acogida por la afición dado que significaba una inyección económica y la salvación ante la quiebra. Briattore, nombrado director deportivo, se comprometió a devolver al QPR a la Premier League “en menos de cinco años”. La afición se vio, por tanto, con licencia para soñar con las máximas cotas futbolísticas después de un largo peregrinar en la categoría de plata. Sin embargo, por unas cosas u otras, la paz social no llegó a instalarse definitivamente en Loftus Road y ello influyó en los resultados del equipo.

El periodo de Briattore al frente del club se caracterizó por la entrada y salida de entrenadores. Hasta nueve preparadores ha tenido el equipo en sólo tres temporadas. John Gregory fue el primero. Luego Briattore se trajo a su compatriota Luigi de Canio, que no duró, como tampoco lo hizo su sustituto: Ian Dowie, ex jugador de los Rangers estuvo nada más que 15 partidos al frente. El ex internacional portugués Paulo Sousa vino después y ni tan siquiera acabó la temporada 08/09 en el banquillo. Gareth Ainsworth ejerció de entrenador/jugador durante algunos partidos, justo lo suficiente hasta encontrar un técnico qualificado. Briattore nombró a Jim Magilton. Este comenzó la 09/10 pero fue despedido tempranamente al filtrarse a los medios que tuvo un duro enfrentamiento con un peso pesado del vestuario. Su sustituto, Paul Hart, que empezó el curso con el Portsmouth en la Premier, se sentó en el banquillo solo cinco partidos. Mick Harford fue su sustituto temporal, hasta la llegada de Neil Warnock –actual técnico-, que acabó la temporada en la que el club eludió finalmente el descenso. La pasarela de nombres de Loftus Road no estuvo circunscrita solamente a los entrenadores. Pasaron jugadores también, muchos. Briattore gestionó los fichajes o cesiones de hasta 47 jugadores durante su etapa al mando del QPR.

La sensación de falta de identidad de un proyecto y los problemas de índole personal que afectaron a Flavio Briattore – el italiano recibió una dura sanción por la que tenía que dejar la Formula 1- contribuyeron a torpedear la labor tanto de entrenador y jugadores. El ambiente en Loftus Road era el peor posible para la práctica del fútbol y el club se hundía. Afortunadamente para los Rangers la llegada de Warnock supuso un bálsamo y también una bocanada de ilusión. La contratación del técnico fue aparejada casi simultáneamente a la decisión de Briattore de dejar a un lado sus funciones operativas en el club. Los resultados acabaron llegando y con victorias ajustadas ante rivales directos el QPR finalizó la temporada 10 puntos por encima de la zona de descenso.

Por fin un verano tranquilo en Loftus Road. Warnock fue confirmado y apoyado sin cortapisas por la directiva del club. Con total libertad de movimientos el nuevo manager confeccionó la plantilla para el nuevo curso. En total, el QPR se ha gastado 5,3 millones de euros en fichajes este verano siendo superado sólo por el Middlesbrough (6,9 millones) en cuanto a la inversión en jugadores. El Queens Park Rangers partía como el cuarto presupuesto de la categoría por detrás del propio equipo de Gordon Strachan (Middlesbrough), Burnley y Cardiff City. La cesión de Tommy Smith (Portsmouth) ha costado 1,8 millones mientras que la compra del portero Patrick Kenny (Sheffield United) supuso el pago de 1,1 millones. Resulta curioso que los fichajes más baratos del verano hayan sido a la postre los más rentables. Así, el QPR pagó 0,9 millones por Rob Hulse, unos 700.000 euros por la compra definitiva de los derechos de Adel Taarabt al Tottenham y 0,6 millones por el fichaje de Jamie Mackie al Plymouth. Además, Shaun Derry llegó del Crystal Palace a coste cero.

Warnock ha pescado este verano en aguas del Crystal Palace, equipo al que dirigió la temporada anterior. También ha mirado a White Hart Lane, del que vino cedido Kyle Walker y de donde adquirió los derechos de Taarabt. El marroquí, todo un lujo para un club de la Championship, ha sido un habitual en Loftus Road en las últimas temporadas.

El éxito este año del QPR se ha basado en la solidez defensiva y el acierto de su delantero Jamie Mackie. Después de la disputa de nueve partidos, el Queens Park Rangers ha ganado 7 y ha empatado 2, erigiéndose en líder en solitario con seis puntos de ventaja sobre el segundo. Además, el club ha anotado 22 goles y ha recibido solamente 2. El joven (25 años) Mackie es el máximo artillero de la competición con 8 dianas. La espectacular forma actual del jugador contrasta con la de la pasada temporada en la que anotó 8 goles en 44 partidos en los que no pudo evitar el descenso del Plymouth Argyle. El islandés Heidar Helguson se está complementando a la perfección con Mackie y ya ha contribuido con 4 goles.

La parroquia de Loftus Road se frota las manos. Después de años de sufrimiento en las gradas parece que esta puede ser la temporada para volver a soñar. Neil Warnock está llamando a la calma a las masas puesto que es consciente de que la liga puede hacerse muy larga. Lo cierto es que todo apunta a que el Queens Park Rangers ha comprado un billete de ida a la Premier League. Si lo consiguiera, y si el West Ham consigue mantenerse, el próximo año habría seis equipos de la capital de Inglaterra en la liga más importante del país. La guinda la pondría el Reading, otro equipo del área metropolitana de Londres, si consiguiera hacerse con uno de los dos puestos de ascenso también.