El follón de la capitanía en Inglaterra

Puso un circo y le crecieron los enanos. El refranero castellano no puede ser más útil para definir con precisión las vicisitudes sufridas por Fabio Capello al frente de la selección inglesa de fútbol. El italiano no para de meterse, él solo, en charcos. Y bueno, no están los tiempos en Inglaterra como para crear polémicas superfluas. Después de navegar a velocidad de crucero sobre una balsa de aceite durante unos meses, el ex del Milan y Real Madrid tuvo sus primeros problemas a la hora de hacer la selección de jugadores que iban a viajar al mundial. Luego, gran parte de la culpa del fracaso de los Pross en la cita de Sudáfrica cayó sobre él. La prensa esperaba que Capello realizara una purga en el vestuario al estilo Laurent Blanc y definiera a la Inglaterra del futuro. Pero tampoco. La cuestión de la capitanía y la jubilación de David Beckham han sido los principales quebraderos de cabeza del italiano últimamente. Muchos no entienden por qué este se ha decidido a reabrir una vieja herida en vías de cicatrizar. Terry volverá a ser capitán... ¿Patinazo o decisión estudiada?

Feeling. Terry es hoy por hoy el único líder en Inglaterra.

David Beckham ha sido el primer capitán de Inglaterra durante el último lustro pero con su salida del fútbol europeo y las continuas lesiones que ha sufrido, su papel en la selección inglesa ha ido cayendo a un segundo plano. Fabio Capello, incluso, llegó a sugerir que el de Leytonstone debería anunciar su retirada de la selección. Quien si se jubiló fue David ´calamity´ James con lo que quedaron vacantes dos puestos de capitán en Inglaterra. Un tercero, Steven Gerrard, continuaba y mantendría la capitanía. Dado que ya había experimentado el hecho de ser capitán y porque tenía la veteranía y los galones necesarios, John Terry ostentó el honor de ser primer capitán del equipo durante un tiempo. Otro defensa, Río Ferdinand pugnó por hacerse con tal galardón pero finalmente quedó relegado a una segunda posición, por delante de Gerrard. Algunos habían apuntado a Rooney como heredero natural para esta responsabilidad pero sus actuaciones extrafutbolísticas lo tachaban de ser un ejemplo.

Así se llegó al affaire Perroncel. Un auténtico tornado que sembró la polémica no sólo dentro de la Premier League, sino lo que era más importante, en el seno de la selección inglesa. Los tabloides destaparon que John Terry -estando casado- mantuvo una relación con la modelo francesa Vanessa Perroncel, ex novia de Wayne Bridge y madre de uno de sus hijos. Se dio la circunstancia de que Terry y Bridge eran amigos dado que compartieron vestuario en el Chelsea. Poco sorprendente es que tras salir a la luz este lío la amistad que hubo quedó rota y además se creó un enfrentamiento, en toda la liga, entre alineados con el del Chelsea y partidarios del lateral del Manchester City. En el medio de todo este meollo, Capello decidió quitar la capitanía a John Terry y concedérsela a Río Ferdinand. El italiano recibió no pocas críticas ante este movimiento por parte de quienes pensaron que el desliz extramarital del defensa no era causa suficiente para descabezar a quien era un auténtico líder en el vestuario de Inglaterra. Entre Ferdinand, James y Gerrard se las apañaron para llevar el brazalete en Sudáfrica (Aunque eso sí, el que pegaba las rajadas en rueda de prensa era Terry).

Ahora que todos estaban acostumbrados a ver a Gerrard y Ferdinand de capitanes Fabio Capello anuncia que Terry volverá de forma eventual (aunque podría ser permanente) a portar el brazalete. Será la próxima semana en un partido de clasificación que enfrentará a Inglaterra con Gales. ¿El detonante de esta decisión? No gustó nada a Capello ver cómo el brazalete fue pasando de jugador a jugador sin que nadie supiera quien debía llevarlo durante el transcurso del amistoso Inglaterra – Dinamarca. Aquel día Lampard debutó como capitán, pero fue sustituído. Las lesiones de Gerrard y Ferdinand, sumadas al espectáculo del brazalete rodante han obligado a Capello a repensarse su decisión y ya está confirmado que Terry capitaneará a los Pross en el próximo encuentro.

Razón no le falta al técnico. Un capitán debe ser una figura respetada, un líder, una referencia y un jugador que actúe con la máxima regularidad. Ése es Terry. Otra cosa es estar de acuerdo en si el central del Chelsea cumple con las normas de señorío y fair play que se presupone a un capitán -motivos por los cuales Capello decidió apartarle de la capitanía. Esta decisión ha hecho saltar chispas en la relación Ferdinand- Terry, aunque se entiende que al del Manchester United ya le queda poco fútbol internacional en sus botas por lo que este es un mal menor. Igualmente, Capello cree que después de casi un año el castigo a Terry ha sido suficiente.

El anuncio de Capello ha provocado que muchos nombres se incorporaran a las quinielas para la sucesión en la capitanía. Unos incluyeron al joven mediocampista del Arsenal Jack Wilshere, por ser un valor de futuro, mientras que otros consideran que Rooney ha pagado ya por sus escarceos fuera del terreno y, por tanto, debe ser ordenado capitán. Al final lo que importa es la aportación que el capitán realiza para su equipo por lo que estaremos expectantes ante la nueva Inglaterra del polémico John Terry.