También con fuerza empezó su etapa en el Inter de Milán. Quien más quien menos podía esperarse que Mourinho se lanzara con el inglés desde el primer día en Londres pero eran pocos los que pensaban que el portugués también hablaría en italiano en su rueda de prensa de presentación con el Inter. Pues lo hizo y dejó perlas. ¡Inigualable!
“¿Cree usted que sería algo difícil que jugadores como Essien, Lampard se adaptaran al juego del Calcio italiano, según su experiencia de entrenador en Inglaterra y por lo que ha visto del fútbol de aquí?, preguntó el periodista. “¿Pero por qué me preguntas por jugadores del Chelsea?”, espetó `Mou´. “Bueno porque son futbolistas a los que usted conoce bien”, respondió el periodista. “Sí, sí, sí, sí, pero créame yo no soy estúpido”, ironizó el portugués. (Ya se sabe aquella máxima. Si me preguntan por jugadores de mi ex equipo y hablo es que los voy a fichar)
“Me gusta que mi presidente diga que ningún entrenador de la liga es mejor que yo, pero no me gusta que diga que soy el mejor”. Mourinho no se aclara.
Mourinho supo en Italia lo que era verse en el disparadero de los medios un día sí y otro también. Allí jugó fuera de casa ya que AC Milán, AS Roma y Juventus tradicionalmente han venido recibiendo un mejor trato mediático, algo que él tuvo que combatir. Silvio Berlusconi, primer ministro Italiano, propietario del AC Milán y dueño de medios de comunicación como la RAI utilizó todo a su alcance para que el Inter de Mourinho estuviera sometido a la mayor de las presiones, pese a que los resultados llegaron casi desde el principio. El Inter era un equipo ganador antes del portugués, de hecho el auténtico dominador del Calcio en la última mitad de la década, y lo que no se había logrado en el campo intentaba conseguirse a través de los medios. ´Mou´ acabaría muy ´quemado´ por esto y es por ello que su relación con los periodistas y la prensa en general sería muy distinta de la que tuvo en Londres. Mientras en Londres era respetado e incluso vanagloriado, aquí era criticado y puesto en el disparadero. Mourinho lo ganó todo con el Inter en escasos dos años(2 ligas en 2 años, una Copa y una Super Copa de Italia y la Liga de Campeones) y el colofón fue espectacular. Quizá este hecho y la presión mediática fueron sus principales impulsos para moverse en el mercado y cambiar de aires.
La entrada de Mourinho en el Real Madrid fue menos rimbombante. El técnico luso, como en ocasiones anteriores, habló en el idioma de su nuevo país, aunque esta vez -sorprendentemente- con menos fluidez que con el inglés o el italiano. La suya fue una rueda de prensa de presentación sobria, sin sobresaltos ni declaraciones altisonantes.
“Soy entrenador de fútbol y me gustan los retos importantes. […] El Madrid es un club único. Creo que para un entrenador importante, no entrenar al Real Madrid sería un hueco importante en mi curriculum. Es un orgullo entrenar a este equipo. […] Mi motivación en el Real Madrid es ganar”. Fueron algunas de las declaraciones de ´Mou´ durante su presentación en Madrid.
Poco a poco fue desperezándose y ha acabado por verse al verdadero Mourinho. Un técnico sin miedo a decir lo que piensa, inteligente para no hablar de lo que interesa a la prensa y capaz de echarse sobre sí la presión para ponérselo más fácil a los jugadores. Curioso es que en su presentación dejó bien claro que no iba a hablar del FC Barcelona. “Lo que a mí me importa somos nosotros”, señaló. Sin embargo, ha sido el eterno rival, precisamente, el centro de muchos de los dardos envenenados que el portugués ha lanzado en rueda de prensa o en declaraciones a periódicos deportivos de Madrid. “El Barça juega con once y muchas veces contra diez”, apuntó en Marca. “Hay rivales que le regalan los partidos al Barcelona porque no juegan todos los titulares”, apostilló tras la victoria 1-0 de los blaugrana ante el Sporting de Gijón.
Las cosas no le están saliendo demasiado bien a José Mourinho. El Real Madrid vence pero no convence y los pitos ya han sonado en el Bernabéu. El descontento de la afición ha espoleado a los periodistas que, sin ser tan críticos como en Italia, ni tan serviles como en Inglaterra, han empezado a ponérselo difícil a ´Mou´. Las comparaciones con el Madrid de Pellegrini ya se empiezan a hacer y ahora se mira con lupa a todo lo que este hace o dice. No obstante, la temporada no acaba más que empezar y las cuentas habrán de saldarse al final o tras el primer gran batacazo blanco. Sea como fuere el genial Mourinho, ese animador de ruedas de prensa conocido de uno a otro confín, parece haber vuelto a la vida en Madrid. Una cosa es segura, aquí no podrá quejarse como en Italia porque Mourinho + Real Madrid = Prime Time en los deportes de todos los canales. El espectáculo está garantizado.